Tras pasar por el quirófano resucitamos al paciente con buenos resultados. Respira y no se queja.
Sea añadió en inlay de madre perla que le faltaba, nivelado y pulido de trastes. También recuperamos la superficie de la laca mediante pulimentado, se colocó una cejuela de hueso tallada a mano, se revisarón todas las conexiones y soldaduras y se procedió a su apantallado.
Ésta ha sido una restauración sencilla, no por facilidad sino porque los cambios son sutiles y ha habido que prestar mucha atención a los detalles. No ha sido una reconversión total pero con mucho tacto hemos conseguido una guitarra nueva con una acción muy cómoda y agradable de tocar.